Pepa Beiras: "Entendemos que ese proyecto no puede ir hacia adelante de ninguna de las maneras"

El proyecto de instalación de un gasoducto en el Parque Nacional de Doñana es uno de los temas que actualmente se encuentran en el candelero de la política española. Algunos partidos lo apoyan, caso del Partido Popular; otros, sin embargo, desautorizan su implantación, caso de Izquierda de Unida. Para conocer con más profundidad todo lo que ello podría suponer para Huelva, entrevistamos para este diario a Pepa Beiras Torrado, coordinadora del Área Provincial de Medio Ambiente de Izquierda Unida en Huelva, que nos cuenta en exclusiva lo que realmente significa el gasoducto de Doñana y las posibles consecuencias que su instalación conllevaría.

Buenas tardes, señora Beiras. ¿Este proyecto, el de gasoducto de Doñana, en qué consiste realmente?

Existe en Doñana una explotación de gas que ya de por sí está explotada y que deja una serie de bolsas vacías. Entonces el proyecto consiste esencialmente en convertir esas bolsas en almacén de gas formando parte de la reserva de gas a nivel nacional. Sería evidentemente gas importado, que se almacenaría para luego distribuirlo. Para ello se necesitaría revisar infraestructuras de tuberías lo cual implican obras. Paralelamente existe otro proyecto que no conozco muy bien, el cual consiste esencialmente en el almacenamiento de dióxido de carbono.

En la formación en la que usted está incluida (coordinadora del Área Provincial de Medio Ambiente de Izquierda Unida) está en contra del gasoducto. ¿Cuáles son los motivos?

En primer lugar, hay una posición que tiene que ver con la ordenación del territorio y con el plan de ordenación de Doñana. O Doñana es una reserva de la biosfera, un Parque Nacional y tiene una serie de figuras de protección gracias a las cuales disfruta de una serie de subvenciones europeas, de una etiqueta y de una imagen que hace que sea unas de las comarcas de España con mayor producto interior bruto… O Doñana es lo que hemos propuesto que sea, gracias a la presión de las industrias, en una territorio industrial. Lo que no podemos hacer es compatibilizar un destino industrial con un destino natural.

¿Cuáles son las consecuencias más inmediatas? Pues todas las obras que hay que acometer para sacar ese proyecto. Construcción de pistas, instalación de tuberías… Todo eso. Es que un proyecto de estas características conlleva una serie de actividades relacionadas con el sector industrial, no actividades relacionadas con la conservación del lince.

Esta situación podría crear fricciones en el gobierno de la Junta de Andalucía. ¿Cree usted que si se llevase a cabo podría producirse elecciones?

Hay asuntos encima de la mesa de mayor envergadura que el tema del gasoducto, no por ello le quiero quitar importancia. No sé de dónde sale la percepción de que que el tema del gasoducto esté generando fricciones. El gobierno de la Junta de Andalucía lo que ha hecho es pedirle al gobierno central, concretamente al Ministerio del Ramo, que el estudio de impacto se haga globalmente al conjunto de proyectos que implican al conjunto de depósitos.  Porque lo que se ha hecho es la presentación de una documentación parcial para cada proyecto y evidentemente éste es un tema conjunto. Algunos interpretan que la Junta de Andalucía lo único que ha hecho ha sido retrasar el proceso. Nosotros lo que entendemos es que ese proyecto no puede ir hacia delante de ninguna de las maneras. Existe una diferencia entre la postura de Izquierda Unida y el PSOE.

El responsable de Izquierda Unida en Huelva, Pedro Jiménez, viajó a Bruselas en el pasado mes de noviembre de 2013. ¿Qué os contó a su vuelta? ¿Qué conclusiones sacó?

Sacó en claro que efectivamente hay que hacer que la ciudadanía se haga cargo de este tema, que en la Unión Europea en este momento se tiene claro que no puede seguir adelante pero también tienen claro que el poder de las empresas energéticas y su influencia en la comunidad europea actualmente es muy grande. El Partido Popular sí tiene claro que quiere sacar adelante el proyecto. El PSOE va a estar ahí. En principio no le interesa mucho que continúe pero tampoco quiere problemas. Entonces va a depender de dónde vengan esos problemas. Es un poco mi interpretación de lo que ha dicho Pedro Jiménez. Por lo tanto, es muy importante que se retome una campaña informativa y de toma de postura ante ese proyecto.

A pesar de la envergadura de este proyecto, lo cierto es que la percepción que uno tiene es que los medios de comunicación lo han intentado solapar… ¿Cuál es su opinión?

Yo creo que tenemos unos medios de comunicación muy convencionales, en general, estamos hablando de los medios impresos y de las radios más importantes, las que tienen más audiencia. Más convencionales en el sentido de que el tratamiento de las informaciones depende fundamentalmente del interés que despierte en determinados sectores. Entonces, el sector empresarial de Huelva, por ejemplo, está de acuerdo siempre con cualquier proyecto que se haga, cueste lo que cueste. Por lo tanto, ello puede acarrear un conflicto y, por lo tanto, cuanto menos sepa la opinión pública acerca del tema, mejor. Pasa lo mismo con el tema de la planta de ciclocombinado que se quiere instalar en Palos. ¿Qué sale en los medios? Nada. ¿Por qué? Porque es conflictiva y lo mejor es que siga su proceso al margen de la opinión del ciudadano. Cuando nos queramos dar cuenta, está hecho.

Pepa Beiras, coordinadora de Izquierda Unida en Huelva, en el lugar de la entrevista, El Rompido (Huelva) | A. Gámez

Para terminar, ¿cree usted que hay posibilidad de que no se instale el gasoducto pese a la insistencia del Partido Popular?

Está claro que las hay, evidentemente, depende de la voluntad política de la Junta de Andalucía. ¿En qué se sustenta? De la presión que reciba. Si recibe presión de las oligarquías, como siempre, pues ese proyecto saldrá adelante; si la presión que recibe es de una sociedad concienciada y movilizada a través de representantes de izquierda que consideran que están defendiendo los derechos de sus ciudadanos, pues evidentemente ese proyecto no saldrá delante de ninguna de las maneras.

Muchas gracias, señora Beiras. Veremos en el futuro qué ocurre finalmente con este proyecto de gasoducto.

Muchas gracias a ti. Sí, esperemos que no se lleve a cabo.

Fuente: Pepa Beiras (coordinadora del Área Provincial del Medio Ambiente en Huelva).